Académicos y funcionarios fueron distinguidos al cumplir treinta años de servicio en la UV. Dos son de Construcción Civil.

Rector Aldo Valle destacó sus esfuerzos y compromiso con la institución.

La Universidad de Valparaíso distinguió a un grupo de académicos y funcionarios que cumplieron treinta años de servicio en una ceremonia presidida por el rector Aldo Valle.

Precisamente el rector Valle destacó el esfuerzo y compromiso de quienes fueron distinguidos: “En estos terinta años acontecen los momentos más relevantes de la vida privada, nacieron nuestros hijos, los educamos y establecimos un vínculo, porque lo que hemos hecho en la vida está ligado a la Universidad. En nuestra historia institucional hemos tenidos momentos distintos y nuestros funcionarios y académicos siempre han contribuido para que la Universidad siguiera desarrollando sus funciones, por eso hoy celebramos sus esfuerzos”.

María Elena Sepúlveda, secretaria de la Facultad de Humanidades, señaló que “es un honor saber que la UV reconoce los años que uno ha trabajado y la labor que realizan los funcionarios”. En tanto Alexandra Guerrero, académica de la Facultad de Odontología, indicó que “la UV es nuestra alma mater, no es que tengamos la camiseta puesta, la tenemos tatuada”.

Para Carlos Arancibia, auxiliar de la Facultad de Odontología, los treinta años significan “un trabajo de toda una vida, mantener una familia y tener a mis hijos profesionales con una gratitud enorme a todas las personas”. Similar opinión entregó Sandra Valencia, secretaria de la Escuela de Ingeniería Comercial, quien se mostró “feliz y emocionada, la UV es mi segunda casa, por eso hacemos el trabajo con corazón”, mientras que la académica de la Facultad de Odontología Valeria Moukarzel aseguró sentirse agradecida de la UV, “porque me dio la oportunidad de ser feliz y hacer lo que me gusta”.

Genoveva Oddershede, secretaria de la Facultad de Derecho, fue la encargada de dar el discurso en representación de los funcionarios y comentó que “en la institución uno crece y madura, pero también es partícipe del crecimiento de los pares, viendo muchos directores o decanos que uno conoció siendo alumnos. Por eso este momento es muy emotivo, ya que da cuenta de la proyección profesional, pero también familiar y personal”.

En representación de los académicos hizo uso de la palabra Alberto Moya, profesor de Ingeniería en Construcción, quien aseguró “tener los mejores sentimientos para esta institución. Cumplí todas mis expectativas en estos años y me encantaría que esta universidad fuera la mejor de todas, lo que se ve reflejado en el esfuerzo de cada uno de nuestros profesores y funcionarios, junto a la gratitud de los estudiantes”.

En el acto también estuvieron presentes el secretario general de la UV, Osvaldo Corrales, junto a decanos, directores de Escuela, jefes de carrera, académicos y familiares de los homenajeados.